Sin acuerdo con los gremios y sin un nuevo llamado a negociar en paritarias, el gobierno de Javier Milei fijó el nuevo salario mínimo para los docentes en $ 500.000 correspondiente a febrero. Esta cifra básica sirve de referencia en las paritarias de las provincias, que después suelen pagar por encima de esos valores.
La medida fue oficializada a través de la resolución 381 de la Secretaría de Educación, publicada este miércoles en el Boletín Oficial, y llega tras el fracaso en la negociación de fines de febrero.
Según los considerandos de la normativa, el Consejo Federal de Educación propuso que el salario testigo docente nacional para el maestro de grado de jornada simple y sin antigüedad sea fijado en $ 500.000, con el objetivo de “sostener” el Programa de Compensación Salarial Docente.
Las autoridades reconocieron que los gremios docentes no aceptaron la oferta el pasado 24 de febrero. Señalaron que el piso salarial fijado fue propuesto por el Comité Ejecutivo del Consejo Federal de Educación (CFE) el 10 de marzo. Es un 19% de suba en comparación al salario de agosto de 2024, que se había fijado en $ 420.000.