sábado, 23 de mayo de 2015

Una feria para festejar en la calle


Desde una locomotora hasta un radar, granos, simuladores para despegar un avión y bajar a una exploración petrolera, animales y food trucks. El paseo que se ubica en Avenida de Mayo y las diagonales ya convocó a una multitud.

 Por Ailín Bullentini
(Página 12) La salida Suipacha de la estación Diagonal Norte del subte desconcertaba, ayer, entrada la tarde, a los pasajeros que la eligieran como vía hacia la superficie. A metros del Obelisco, una locomotora de principios de siglo –sí, real– y dos de los flamantes vagones de la renovación ferroviaria que impulsó el Ministerio de Interior y Transporte confundían la calle con una estación de tren. Las instalaciones integran el Paseo Patria es Innovación, una de las maneras que el gobierno nacional eligió para celebrar el 25 de Mayo, la “revolución” patria y el decimosegundo aniversario de la gestión kirchnerista.



Diagonal Norte es, desde ayer y hasta el domingo, “la demostración de los logros de la década”, explicó un miembro de la organización de los festejos. La Avenida de Mayo y la Diagonal Sur se convirtieron en una Argentina a escala: allí tuvo lugar la Feria Regional “Patria es nuestra tierra”, con exposición de granos, frutos, animales y vegetación autóctona de cada región del país y puestos de venta de productos locales. Desde el Ministerio de Desarrollo Social, Eva Perón revivió a través de gigantografías, audios de sus discursos y una puesta de luces que revalorizó las dos esculturas que la recuerdan en las fachadas de ese edificio: la instalación “Patria es Justicia Social” completa la propuesta con la que el kirchnerismo “rinde cuentas de lo hecho”. La Plaza de Mayo está reservada para la música, pero la fiesta es en todo su alrededor.

Las mejores cartas

“Me puede dejar pasar, señor. Quiero ver la feria.” Luisa espera “desde las cinco, en el diario decía que a las cinco abría”, para caminar el paseo Patria es Innovación. Las entrecalles de la avenida estuvieron cerradas hasta las 18.30 “para darles tiempo a los expositores que vienen de las provincias a acomodarse bien”, apuntó Pablo, uno de los encargados de logística. Sobre Diagonal Norte, una de las tres principales vías que unen la Plaza de Mayo con el Obelisco, cada cartera del Gabinete nacional desplegó “su mejor carta” para mostrar: “Lo más llamativo, lo más importante, lo destacado de estos 12 años”, puntualizó Pablo.

Si de mostrar se trataba, el Ministerio del Interior se lo tomó a pecho: una locomotora antigua y dos vagones flamantes. Reales. Planificación no se quedó atrás: un simulador de Atucha II, un radar meteorológico y una maqueta a escala real del “primer vehículo experimental” que desembocará en el Tronador II, el cohete de transporte espacial nacional. Los gigantes llegaron al centro porteño en la noche del jueves. Con despliegue tecnológico, YPF ofrece a los visitantes “bajar al fondo de una perforación petrolera” y Aerolíneas Argentinas “despegar un avión” a través de simuladores. El “jueguito del avión”, como lo llamó Gonzalo, reunió a una decena de curiosos en pocos minutos y fue el puesto que más temprano contó con una fila de espera.

Paula y Graciela se encontraron con la exposición “de salida del laburo” y caminaron por algunos puestos “sin prestar mucha atención”. Hasta que encontraron el stand del Ministerio de Justicia que ofrecía la leyenda YoDigoNoALaTrata en telgopor gigante para que quien quiera se saque una foto. Así lo hicieron las oficinistas. “Se parece a la movida de #NiUnaMenos (que convocó una multitudinaria movilización para el próximo 3 de junio frente al Congreso), me parece importante”, aclaró Paula.

Aromas y sabores

Un corralito con cuatro ovejas descansa sobre el medio del nacimiento de la Avenida de Mayo. Más adelante, camino al Obelisco, habrá vacas para ordeñar, cabritas y llamas, intercalados con cajones de manzanas, peras, limones y naranjas, frutillas y uvas. También semillas, confituras, árboles de diversas especies. Flores, hortalizas. El diseño de esta parte de la Feria Regional “Patria es nuestra tierra” intenta reflejar las características principales de la producción de cada región del país “y su variedad porque el recorrido destaca la cantidad de cosas que nacen de la Argentina y de los argentinos”, aporta, desde la organización, Gisela.

La disposición de los elementos sobre el asfalto –muy llamativo en cuanto a la puesta en escena, prolija en la combinación de colores y texturas–invita a los visitantes a pasear chusmeando qué es cada cosa, a qué región pertenece y si “¿se puede agarrar?”, “¿Se puede comer?” o “¿se puede llevar?”. “Es hermoso todo”, replica Claudia, ante la negativa del seguridad que la obliga a dejar el plantín de albahaca en su sitio. “Carlos, tenemos que armar los plantines en casa, de este finde no pasa”, le reclama, distante, a su esposo.

La exposición se mezcla con puestos de comida regional –los productos son regionales, los puestos, pequeñas casas rodantes convertidas en cocinas, fueron aportados por Food Trucks Buenos Aires– que, desde el inicio de la feria, fueron la atracción más llamativa y asistida. Los aromas de pampeana carne asada se mezclaron, enseguida, con el de la pesca patagónica, las empanadas norteñas y las papas rústicas de Cuyo. Entrada la noche, se haría complicado conseguir alguna de las mesas estilo camping esparcidas cada tanto en la feria para cenar, tomar o descansar de tanta caminata.

Productores

Diagonal Sur fue el destino de los productores aunados en los programas de Agricultura Familiar y la red federal de Comercios de Proximidad (Red Com.Pr.Ar) de todo el país que fueron convocados para comercializar sus productos durante este fin de semana de fiesta. A pesar de no tener el despliegue de infraestructura de otros sectores del paseo, la feria, que se extiende a lo largo de toda la avenida y compartió la calle con los puestos de algunas organizaciones de pueblos originarios cercanas al Gobierno, se las arregló para mostrar variedad: miel de Tandil, embutidos de Córdoba, dulces de varias provincias, masas de San Juan, tejidos de Santa Cruz, indumentaria de Buenos Aires y de la Patagonia y más. Julio termina de grabar una pulserita de cuero. Lo suyo es ese material: pulseras, cinturones, billeteras. Viene del noreste. “Siempre nos sirve llegar a otros sitios, demostrar que no sólo Buenos Aires funciona. Esto es eso: acá funcionamos todas las provincias”.

No hay comentarios: