“Disculpen toda esta cháchara”

Por Mariana Dufour

Luego de los incidentes con el equipo de CQC, el intendente de Pinamar envió a la comunidad un peligroso mensaje que, lejos de cuestionar el violento accionar de sus funcionarios y de asegurar la libertad de trabajo de los periodistas, excusó sus responsabilidades y la de sus funcionarios.

Antes de dar inicio a la Ceremonia Inaugural del 30º período de Sesiones Ordinarias del Concejo Deliberante del Partido de Pinamar, la secretaria del cuerpo, Susana Muradas, leyó dos comunicados de repudio a los hechos de violencia protagonizados por los funcionarios y dirigidos hacia trabajadores de prensa.

En el comunicado, la Asociación de Prensa de Pinamar “deja en claro que repudia enérgicamente las agresiones dirigidas a los periodistas del programa televisivo CQC por parte de funcionarios de alto rango que integran el gabinete municipal del intendente Blas Altieri. La APP repudia, también, las amenazas y presiones recibidas por el periodista local, Juan Luis De Marchi, por parte de Jorge Liberanome, actual director del Instituto Previsional Social de Pinamar”.

Los ediles no oficialistas emitieron un enérgico comunicado cuyo mensaje repudia “estos procederes alejados de la democracia” provocadas “por un grupo importante de funcionarios del Departamento Ejecutivo para impedir que se entrevistara al Intendente Altieri. (…) Por ello, exigimos del Departamento Ejecutivo de la Municipalidad, la inmediata cesantía de todos los funcionarios involucrados en estos actos de violencia, que no se pueden tolerar”.

Un mensaje peligroso
Culminado su discurso inaugural, el intendente emitió un mensaje a los presentes que, lejos de cuestionar el violento accionar de sus funcionarios y de asegurar la libertad de trabajo de los periodistas, excusó sus responsabilidades y la de sus funcionarios. Esta actitud justifica, entonces, las declaraciones del subsecretario de Deportes, Jorge Yeza, del día siguiente: “Si bien no me siento orgulloso, no me arrepiento y lo volvería a hacer”. Allí radica la peligrosidad del mensaje de Altieri que, como autoridad máxima de Pinamar, da vía libre al accionar de sus hombres. En otro párrafo de su alocución, el intendente pretendió señalar a los periodistas cómo deben realizar su trabajo.

“No quiero soslayar las notas leídas anteriormente”, inició el mandatario. “El entorpecimiento que ha sufrido la comunidad, no Altieri, a mí no me venían a hacer una nota… les quiero decir a los periodistas… porque cuando me quieren hacer una nota, como lo hacen todos ustedes, me llaman a mi casa, a mi celular, me piden la nota y yo respondo constantemente a la requisitoria periodística”, aseguró. “Por eso, disiento en que hayan venido a hacerme una nota a mí porque no era el momento ni la oportunidad. Yo, las notas, las doy pautadas, como lo hacen todos los políticos. No tengo inconveniente en desarrollar ningún tema que no esté en el ámbito de la Justicia. El tema interno de la denuncia hay que hablarlo con el juez o con el fiscal. Entonces –instruyó Altieri– la nota se la tienen que hacer a ellos, a mí no. Y esta situación que yo he vivido con este programa en especial, impidiéndome la salida del Municipio, la denuncié penalmente. Esto no es libertad de prensa, se llama hostigamiento, acoso y no dejar funcionar al intendente ese día”.

Luego, Altieri victimizó a uno de sus funcionarios, que las filmaciones emitidas por medios nacionales muestran, en forma contundente, el delicado uso que hizo de su hija: “Me pareció tremendo lo que le pasó al funcionario De Marco, que le pisaron a su hija, se la llevaron por delante, y él denunció esto”. Y, mostrándose ajeno a la violencia ejercida por sus funcionarios, sentenció: “Es bochornoso esto que estamos viviendo en Pinamar pero les pido que pongamos paz, que pongamos diálogo, comprensión y trabajemos para los que nos eligieron. De ninguna manera voy a aceptar la falta de respeto, lo ilegal y lo que no corresponde”.

El intendente finalizó la alocución oficial con unas palabras muy poco felices: “Señor presidente, señores, disculpen toda esta cháchara… como dijo un pensador…”.