Sr. Ardalla, Sr. Jorge Liberanome y Sres. “X” (para denominar de alguna forma a aquellos que sabemos, financian este tipo de vergonzosas campañas no se dan a conocer quedándose sentados en la comodidad de sus “Sillones” detrás de un despacho…)
Antes de analizar o siquiera leer de qué se trata el libro que han escrito sobre mi persona, quisiera efectuar algunas consideraciones acerca de quiénes son las personas que se encuentran detrás de las edición y publicación de este libro.-
Fernando Brunet… En realidad no se sabe por qué motivos un escritor utiliza un seudónimo si la obra que escribe no es poesía ni literatura de ficción. Si quiere denunciar supuestos hechos o realizar una investigación histórica seria, debería al menos decir cómo se llama, lo que se dice “dar la cara”. Fernando Brunet, ud. se llama Fernando Ardalla.-
A continuación cito textualmente una página de internet Geselina “quitando caretas”
“Llego a Villa Gesell en el año 1991, en una elegante camioneta Peugeot 504, 0km, pero la alegría le duro poco ya que dicho vehículo tenia captura por ser robada, algo que Ardalla intento tapar como pudo pero para aquellos que tenemos memoria no se nos escapo, fue procesado por encubrimiento por los tribunales de Dolores y su prontuario agrandado ya que no era la primera vez que debía tocar el piano por cuestiones con la justicia.
A estos “inconvenientes” se le sumaron otros, a consecuencia de su enfermedad, enfermedad que tiene que ver con diferentes adicciones. En el año 2000 fue denunciado por exhibición obscena en la vía pública ya que una vecina del sur lo denuncio por mostrarse desnudo frente a una menor, estas son algunas de las cuestiones que intentan guardar Fernando Ardalla.”
Por favor Sr. Ardalla, explíquenos si esto es cierto y qué pasó con las causas. Creo que es algo justo que lo haga teniendo en cuenta que si ud. publica un libro sobre mí, poniéndome bajo el escarnio público una vez más, de una forma totalmente maliciosa, al menos tengo derecho a preguntarle a ud. públicamente sobre sus problemas con la justicia. Yo por mi parte obtuve dos sobreseimientos ¿Publica acaso esto en el libro? ¿Habla de los argumentos que da un juez para decir que soy inocente?… Seguramente que no.
En cuanto al Sr. Liberanome, creo que la mayoría de los presentes conoce a este personaje ¿No resulta demasiado sospechoso que esta persona esté detrás de la publicación de un libro de este tenor? El Sr. Liberanome es abiertamente Altierista, de hecho lo ha apoyado públicamente en la última elección. Esto es claramente por demás sospechoso. Siendo ud. Sr. Liberanome, quien se ha encargado de la edición y publicación del libro así como de contratar al Sr. Ardalla, alias “Brunet” ¿podría explicarnos de donde salieron los fondos para efectuar esta producción? ¿Acaso pagó ud. el libro de su propio bolsillo? No lo creo ¿Cómo se contactó con el Sr. Ardalla y desde hace cuanto lo conoce?
Según me ha contado personalmente el Sr. Ardalla una de las veces en que se comunicó conmigo intentando que yo de mi testimonio, a lo cual me negué, él mismo me dijo que ud. se le acerco luego de un acto político en Mar del Plata y le preguntó cuánto cobraba por escribir un libro sobre Porretti. Esto no hace más que dejar en claro el carácter de mercenario de su parte y del periodista además de la clara maliciosidad con que se ha realizado.
Por último, sabemos de buena fuente, por cuanto puede comprarse al Sr. Ardalla. Sabemos que a través suyo Sr. Liberanome, pues ellos no se manchan las manos, los Sres. Blas Antonio Altieri y Alberto “Beto” Morales, habrían pagado la suma de $20.000 en concepto de adelanto y de $100.000 luego de finalizado el libro. Así cómo también se hicieron cargo de la impresión del mismo.
Lo que Uds. Hacen, no puede estar amparado por el derecho a la libertad de expresión, a la libertad de prensa o a la libertad de trabajar. Ello por cuanto su accionar constituye un delito y genera daño a personas inocentes. Lo que ud. hace es desinformar, atentando contra la verdadera libertad de expresión de la que gozamos en esta democracia que tantas vidas y años de lucha costó. Mal utilizan este derecho tan importante e inherente a la democracia, amparándose maliciosamente en él. Lo único que logran entonces es bastardear a la profesión del periodista y por ende a todos aquellos periodistas que honradamente enaltecen la actividad.
Desde ya, le hago saber que iniciaré las correspondientes acciones legales entendiendo que su conducta encuadra en uno o algunos de los tipos penales normados en el código. Persiguiendo una justa reparación económica así cómo moral y que se saque de circulación el libro.
SALUDOS CORDIALES.-
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