por Walter Montero
¿A quién vas a votar? Pregunta infaltable en cualquier encuentro estos días de campaña auténticamente Pinamarense.
Los candidatos aparecen por todos los medios posibles a buscar nuestro voto. Sonrisas forzadas, abrazos de compromiso, chistes, chicanas, saludos al viento. Reuniones, visitas a los barrios, promesas, proyectos…¡ hay equipoo ¡ es lo que venimos viendo y escuchando y lo que continuará hasta el 28 de marzo.
Ese día, antes de acostarnos para el día siguiente ir al trabajo, a estudiar, o “simplemente” para iniciar una nueva jornada de lucha por mantenernos o mantener a nuestra familia en pié, habremos logrado tener un nuevo intendente… ¿o viejo intendente tal vez.?
Esa noche algunos festejarán, otros pensarán ¿qué nos falto para ganar? La mayoría, como Ud. y yo, pensará: ¿y ahora…? ¿Cambiará algo?
Es claro que en todos estos años de vida democrática un saldo negativo propio, auténticamente criollo, es que las Promesas de Campaña No Se Hacen Para Ser Cumplidas. Todos sabemos que nos mienten mucho o poquito. Nada jamás. Esto no es una apreciación subjetiva, es absolutamente real y comprobable si usamos un poco nuestra capacidad de memoria.
Por supuesto que para todo siempre hay una explicación de por qué no se hizo lo que se había prometido, o por qué se cambió tanto del original a la mala copia. Le aclaro algo: si Ud. no es capaz de esto, de mutar sobre la marcha, de “reposicionarse”, no se dedique a la política y manténgase en la Cooperadora de la Escuela que va a ser más sano.
¿Cómo explicamos sino que FUNCIONARIOS del actual gobierno, o recientemente alejados del cargo, como la dupla Cassale – Di Maio participen de actos políticos de la oposición? Serán discípulos de Cobos? Alguien me dirá no, no puede ser. ¿No decían que eran peronistas K?, si justamente los K están dolidos por esta TRAICION. Claro tiene razón, me equivoque seguramente.
Mi abuela decía, “ojo con las malas compañías”. Un juicio riesgoso, típico de una abuela protectora que quería lo mejor para sus nietos. Aunque por otra parte la psicología se encargó de darle algo de fundamento teórico, de aggiornarlo un poco y habló de “presión de grupo”. Me pregunto: ¿Qué tipo de lógica es la que me permite unirme a quién semanas atrás se encargó sistemáticamente de hundirme? La única lógica que encuentro es la del REJUNTE para ganar.
Ganar se trasforma en el único objetivo, y por eso, para ellos, el fin justifica los medios. Obvio que esto siempre trae aparejado una contraprestación para quien se acerca al candidato. Perdón, me expresé mal. Quise decir tener la oportunidad de trabajar para la comunidad y el beneficio de todos.
Ahora bien, por un lado esta dios y por el otro el diablo? NO. En la lógica del rejunte sólo existen los diablos.
“¡Vamos a hacer esto!”, “¡Vamos a mejorar aquello!”, “¡Vamos a transformar esto otro ¡”. ¿Cuántas veces lo escuchamos?
Pregunto: ¿Vamos a hacer el Hospital nuevo otra vez? Creo que contando dos proyectos de la gestión anterior, y dos de esta ya vamos por cuatro si las matemáticas siguen siendo exactas y la memoria no me falla. Mientras tanto la Salud sigue teniendo sus grandes agujeros negros.
Pregunto: ¿Terminaremos alguna vez el Barrio de las 62 viviendas de Ostende? O por lo menos, ¿se iniciarán acciones judiciales serias contra quién corresponda? Mientras tanto el tiempo pasa, nos vamos poniendo viejos y las familias siguen sin techo.
Pregunto: la juventud política (¿?), jóvenes en edad tal vez, pero con ideas y mañas tan viejas como la política, ¿tendrá en cuenta que en el verano sistemáticamente los jóvenes se quedan sin actividades deportivas y recreativas? ¿Entenderán y sabrán expresar lo que los jóvenes realmente necesitan y que no es precisamente un discurso político de campaña electoral, vacío y poco fundamentado?. Mientras tanto lo pibes siguen esperando, haciendo lo que pueden, que mucha veces es nada. En otras escuchando un discurso totalmente alejado de su realidad que algunas fundaciones se empeñan en tratar de imponer. Me refiero a imponer en el mercado el nombre de la Fundación, obvio.
Pregunto: Se investigará seriamente lo actuado por esta administración o comenzarán los pactos de no agresión? Casualmente el actual Intendente Interino volverá a su banca en el HCD una vez que tengamos nuevas autoridades. Es claro, ¿no?
En este aspecto, pregunto: ¿Qué hará cada uno de los candidatos? ¿Que actitud se adoptará para con los De Vito, Alba, Quiroga, Esperón & Cía?. Bueno, el último ya cumplió. Antes de irse pudo incorporar a su esposa o ex – esposa como docente de la Casa de La Cultura. ¿Será en parte de pago de la cuota alimentaria?
En fin, Ud. y yo el 29 de marzo seguiremos en nuestras cosas. Lo trágico es que nuestras cosas en gran parte dependen de las decisiones, de los acuerdos, de los pactos, de las alianzas, de los negocios, (o se dice negociados?) que se establezcan entre quienes tengan la Autoridad Institucional de la Municipalidad y quienes tengan el poder, sobretodo económico, del municipio.
La suerte no está echada todavía. Pensemos, recordemos y después … VOTEMOS.
Eso si, a partir de Abril, esté quién esté en el sillón de la intendencia, todos, absolutamente todos, Cooperativas, Sociedades de Fomento, Medios de Comunicación Clubes, Sindicatos, Vecinos, Adultos y Jóvenes, Ud. y yo, exijamos que las promesas de campaña, aunque sea un poquito, se cumplan. No aceptemos cuentos y explicaciones vacías. No aceptemos más el viejo verso típico de los políticos. El que quiera ser Intendente que se haga responsable de ello y de las cosas que hoy promete. Que no nos cambien el discurso una vez que estén acomodados en el escritorio. Que, como dice Joaquín Sabina, no nos compren por menos de nada y ser valiente no salga tan caro. Seamos ciudadanos reconocidos y escuchados los 365 días del año y no solamente para estos momentos eleccionarios. Votemos pensando y a partir de ello tomemos la mejor decisión. La nuestra, la de cada uno. Pero que esa decisión en el fondo apunte siempre al beneficio de todos.
1 comentario:
Leo esto después del tiempo... felicitaciones me siento identificada en este art reflexivo .
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